Esta situación ya venía incomodando a la ciudadanía y a los profesionales de la odontología, debido a los riesgos que ésta práctica conlleva en la salud de los araucanos.
Voceros del grupo habilitador describieron que en dicho lugar se encontró un establecimiento comercial “tienda”, pero no se evidenció ninguna práctica relacionada con la queja, sin embargo se le informó a los propietarios del lugar sobre las consecuencias de la realización de este tipo de actividades.
“Cabe resaltar la importancia de informarnos al encontrar alguna de estas prácticas que no estén cumpliendo con el debido permiso del ente territorial en salud para realizar este tipo de procedimientos, nuestro intención es garantizar la calidad de los servicios y constatar que dónde los presten estén habilitados en la Unidad de salud y que se constate la calidad en todo lo requerido por la Ley”, explicó Forero.